Funcionarios de la embajada de España salen de Bolivia

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El gobierno boliviano informó el viernes que seis funcionarios de la embajada de España salieron del país tras el impasse ocurrido por la aparición de “encapuchados” españoles en la residencia de la embajadora mexicana en La Paz, donde están asilados nueve ex miembros del gobierno del presidente derrocado, Evo Morales.

El 27 de diciembre diplomáticos españoles acudieron a la residencia de la embajadora de México en Bolivia, María Teresa Mercado, donde están asilados los ex funcionarios de Morales a quienes el gobierno boliviano rechaza concederles un salvoconducto y los acusa de delitos comunes.

Según el gobierno boliviano seis hombres, que acompañaban a la encargada de Negocios de España y al cónsul español, acudieron al lugar con el “rostro cubierto y presumiblemente armados”.

España y México afirmaron que se trató de una visita de cortesía de los españoles a Mercado y que no hubo intención de liberar a los refugiados bolivianos. Pero la presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, calificó de “inconsistente” la explicación, los declaró “personas no gratas” y les dio 72 horas para abandonar el país.

“De las seis personas que salieron están precisamente los famosos encapuchados esos que quisieron entrar de forma irregular a la residencia de México. Todos miembros de la Guardia Civil de España”, informó el director de Migración, Marcel Rivas, a medios bolivianos.

Los seis funcionarios dejaron Bolivia en la madrugada en un vuelo con escala en Colombia y destino final en España. La encargada de negocios de España y la embajadora de México ya habían abandonado el país.

Rivas explicó que la embajada de España había enviado una nota a la cancillería boliviana en la que informaba el ingreso de los seis funcionarios el 14 de noviembre al país, que su salida debía ser el 28 de diciembre y que llegaban como “apoyo técnico a la embajada” de España en La Paz.

La víspera el presidente de México, Andrés Manuel Lopez Obrador, informó que no entregará a los nueve asilados y que hará prevalecer esa condición.

España responde a Bolivia y expulsa a tres diplomáticos ‘por gesto hostil’

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El Gobierno español declaró el lunes 30 de diciembre del 2019 personas no gratas a tres diplomáticos bolivianos acreditados en España para que salgan del país en un plazo de 72 horas, "en reciprocidad al gesto hostil" del Ejecutivo interino boliviano de expulsar a la delegación española que se vio envuelta en un incidente en la Embajada de México en Bolivia.

De esta manera, España responde a la expulsión de los diplomáticos españoles Cristina Borreguero, Álvaro Fernández y a un grupo de policías, a los que Bolivia había dado 72 horas para abandonar el país tras el incidente ocurrido a fines de diciembre en la Embajada mexicana en La Paz, donde se encuentran refugiados varios altos cargos del anterior Gobierno de Evo Morales.

El Gobierno español ha explicado en un comunicado que tras el gesto hostil de Bolivia, los diplomáticos bolivianos afincados en Madrid tienen un plazo de 72 horas para salir de España. Se trata del encargado de Negocios de la Embajada boliviana en Madrid, Luis Quispe; el agregado militar Marcelo Vargas; y el agregado policial Orso Fernando Oblitas.

Madrid exige en la nota que el Gobierno interino de Bolivia "reconduzca y desescale los contenidos de sus afirmaciones y se recupere cuanto antes el buen sentido de confianza y cooperación" entre ambos países. España, además, "rechaza tajantemente cualquier insinuación sobre una supuesta voluntad de injerencia en los asuntos políticos internos" de Bolivia y aclara que "cualquier afirmación en este sentido" constituye "una calumnia dirigida a dañar" las relaciones bilaterales entre ambos países "con falsas teorías conspiratorias".

"La relación entre nuestros dos países se basa en el mutuo respeto a nuestras instituciones democráticas y esta será siempre la referencia en nuestras actuaciones", añade el Ejecutivo español en el escrito.

Denuncia ante la Corte Internacional de Justicia

La semana pasada, México denunció a Bolivia ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), máximo tribunal de la ONU, por violación de las leyes internacionales que rigen las relaciones entre estados luego de que las autoridades bolivianas desplegaran a un gran número soldados alrededor de la embajada en La Paz.

El ministro de la Presidencia boliviano, Yerko Nuñez, denunció un plan internacional para desestabilizar “la democracia y la paz en Bolivia”.

La Cancillería española negó que alguno de sus diplomáticos estuviera involucrado en algún intento para “facilitar la salida de las personas” asiladas en la residencia de la embajada de México en La Paz y rechazó la denuncia del gobierno de Bolivia por un supuesto “atropello” a su soberanía.

El Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación de España indicó en un comunicado que se trató de una visita “de cortesía’’ de su encargada de negocios.

Dentro la Embajada mexicana se encuentran aproximadamente diez antiguos dirigentes del Movimiento Al Socialismo del expresidente Evo Morales en calidad de asilados políticos, cuatro de ellos con orden de detención.

Son el exministro de la Presidencia Juan Ramón Quintana; la exministra de Culturas Wilma Alanoca; el exgobernador de Oruro Víctor Hugo Vásquez y el exdirector de la Agencia de Gobierno Electrónico y Tecnologías de Información y Comunicación Nicolás Laguna.

El gobierno interino de Bolivia ha tenido fricciones con el de México desde que este país le concedió asilo al depuesto presidente Evo Morales cuando renunció a la presidencia el 10 de noviembre, luego de perder el respaldo de las fuerzas armadas y de la policía tras semanas de protestas en torno a unas elecciones que, según una auditoría internacional, se realizaron bajo la metodología del fraude.

Tras estar asilado en México, Morales se fue a Argentina, donde reside ahora.

(La Jornada, agencias)